Hoy he improvisado unos garbanzos con espinacas. Di un vistazo por internet buscando recetas, y basándome en ellas, he preparado el plato de la forma que os cuento.
Ingredientes:
Garbanzos (pueden ser de bote, ya cocidos)
Espinacas congeladas (por comodidad, sobre todo)
Cebolla
Ajo
Aceite
Sal/Pimienta
Tomate triturado.
Realización:
sistema de cocción que uséis -(olla normal o rápida)
Cuando estén cocidos, retiráis el perejil, cebolla y ajo y escurrís el agua de cocer. Lo dejáis aparte.
Al mismo tiempo que se cuecen los garbanzos, podéis hacer lo mismo con las espinacas. Yo suelo utilizarlas congeladas porque me resulta más cómodo. En este caso, aproveché unas que ya tenía cocidas. Podéis cocerlas en la olla rápida o simplemente poniendo agua a hervir a la que en el momento de romper la ebullición añadís un poco de sal. Cocéis durante unos minutos y luego escurrís. O incluso, como en el caso de los garbanzos, podéis utilizar espinacas de bote, ya cocidas. ¡Más fácil imposible!
Picad en juliana una cebolla de tamaño medio o media, si es grande y haced lo mismo con un diente de ajo. Dejad que se poche a fuego lento; cuando ya se haya dorado, añadid el tomate triturado y dejad que todo junto vaya cociendo durante diez o quince minutos. ¡Qué no se os olvide salpimentar! (esto va sobre todo por mí)
Para saber si el tomate ya está, el truco está en fijarse si "ha engordado". En ese caso ya solo queda el último paso, añadir los garbanzos y las espinacas, revolver todo bien y dejad que de un hervor todo junto durante otros cinco minutos. Después de eso, podéis apagar el fuego. El calor residual hará que sigan cociendo y mezclándose los sabores.
Si queréis convertirlo en plato único, podéis cocer uno o dos huevos y picarlos para espolvorearlos por encima. Bon appetit!
Comentarios
Publicar un comentario