Habitas (también podéis usar de las que venden congeladas)
Cebolla
Menta
Yogurt
Maicena (1 cucharada)
Aceite de oliva
Sal y pimienta.
Lo primero que hay que hacer es cocer las
habitas. Yo las hice al vapor, pero también podéis usar el modo tradicional,
poniendo una olla con agua al fuego y cuando rompa a hervir, añadir las
habitas, dejándolas el tiempo suficiente para que queden al dente. Escurrir y
dejar enfriar (también podríais romper la cocción poniéndolas luego en agua
fría, pero yo ese paso me lo salto).
Por otro lado, poner otra olla con agua al fuego y dejar que hierva.
Cuando lo haga, añadir la sal y echar la pasta (la cantidad irá en función del
número de comensales.). Dejar que se haga durante el tiempo que indica el
paquete.
Mientras tanto, preparamos la salsa. Ponemos al fuego una sartén en la
que habremos echado un chorrito de aceite (dos o tres cucharadas, más o menos).
Picamos en brunoise (trocitos pequeños) la cebolla y lo añadimos a la sartén
para que pochen (sabremos que esté cuando veamos que coge un tono algo
traslucido y está blandita)
Una vez que la cebolla está pochada, añadimos las habitas y dejamos que rehogue
todo junto. durante un par de minutos. A
continuación, una cucharadita de maicena que también dejamos que se rehogue
A continuación, incorporamos un poco del agua de cocer la pasta -mejor
hacerlo poco a poco, añadiendo en función de que queramos la salsa más o menos
espesa- y un par de cucharadas de yogurt. Dejamos que cueza y mientras lo hace irá
cogiendo cuerpo.
Terminamos con un golpe de pimienta y un toque de menta fresca. ¡Listo
para comer!
Versión ensalada: Esta misma receta puede adaptarse para servirse fría. En este caso, refrescaremos la pasta con agua fría y después la dejamos escurrir bien para que no quede aguada. También añadiremos un chorrito de aceite a la pasta para evitar que quede pegajosa.
Una vez pochada la cebolla y rehogada junto con las habitas, salpimentamos y mezclamos con la pasta ya fría. Un golpe de pimienta, un poco de menta fresca (o de albahaca) y un chorrito de zumo de limá o limón para dar un toque de frescor. Si queremos, podemos rallar un poco de piel del cítrico empleado.
1.
Las habitas pueden tenerse cocidas ya
previamente.
2. He utilizado yogurt porque desde hace un tiempo lo uso para sustituir a la nata en las recetas que lo llevan, pero la receta en que me inspiré lleva nata. En su lugar, también podríais utilizar leche evaporada.
Comentarios
Publicar un comentario