Sea por la razón que fuera el otro día me
encontré con un montón de yogures cercanos a la fecha de caducidad y unas
manzanas olvidadas en el cajón de la fruta. Se me ocurrió que podía preparar un
bizcocho para desayunar el domingo. El
resultado fue un bizcocho que estaba tan rico que cuando me di cuenta, había desaparecido la mitad y aún no le
había hecho fotos.
Ingredientes:
2 medidas de yogur de azucar
Ralladura de limón
1 medida de yogur de aceite de girasol
1 yogur natural
3 huevos
4 medidas de yogur de harina
1 sobre de royal
Manzanas partidas en lonchas finas
Canela
Elaboración:
Ponéis en un bol el azucar, la ralladura de limón y los huevos
y los batís juntos hasta que esté bien mezclado. A continuación añadis el aceite y el yogur y de nuevo batís bien. Cuando etá
bien mezclado, incorporáis la harina
tamizada y el royal y mezclais hasta conseguir una masa homogenea.
En un molde de plum cake previamente encamisado (engrasado con aceite
o mantequilla y luego cubierto con harina –acordaros de eliminar el sobrante)
ponéis una capa de lonchas de manzana, espolvoreais con canela y vertéis una primera capa de masa de
bizcocho; de nuevo, otra capa de lonchas de manzana, espolvoreáis con canela y poneís
la segunda capa de masa de bizcocho y así sucesivamente (puse tres capas de
manzana). Podeís terminar con una última capa de manzanas o con la masa de
bizcocho. Como a mí me habían quedado unos cuantos gajos, los distribuí por la
superficie un poco a modo de adorno y volví a espolvorear con canela.
Lo meteis en el horno a 180º durante unos 35/40 minutos (el tiempo
variará en función de cada horno). Para saber que ya está hecho, tan solo
tendréis que pinchar el bizcocho, si el pincho o cuchillo sale limpio, es que
ya está hecho.( Cada horno es un mundo. En mi caso, puse el
bizcocho durante 20 minutos con el ventilador y luego, cambié y puse únicamente
calor por abajo)
TRUCO: Batir bien los huevos con el azucar nos ayuda
a conseguir que el bizcocho quede más esponjoso.
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